SANTO DOMINGO. – El Servicio Nacional de Salud (SNS) no ha cumplido con sus objetivos fundacionales debido a un gran número de lacras en su funcionamiento, que impiden una mayor eficiencia.
Así opinó en el programa Sociedad y Seguridad Social el ex director de ese organismo, Nelson Rodríguez Monegro, quien mencionó la centralización de los servicios y la politización entre los mayores inconvenientes.
Consideró que esto último es un asunto antiguo, que impide que el sistema cuente con el personal capacitado idóneo, pues es nombrado por su membresía partidaria.
RAZÓN DE SER DEL SNS
Recordó que el SNS surgió por una Ley (123-15) que procuraba separar las funciones del Sistema de Salud Pública.
Por un lado, mantener la rectoría, regulación, supervisión, planificación, y los programas prioritarios de Salud Pública, y por otro, la competencia de brindar los servicios de salud a través de los hospitales.
Insistió en que su verdadera competencia era la gestión técnica, administrativa y financiera a los servicios Regionales de Salud para que estos operaran de manera descentralizada.
Comentó que no hacerlo así repercutió en la calidad y la cantidad de servicios prestados en los hospitales públicos, a tal punto que muchos afiliados en el Senasa Subsidiado pasaron a atenderse en el sector privado.
CORRUPCIÓN EN CENTROS PÚBLICOS
Según Monegro, en los centros públicos hay mucha corrupción, existen mafias que, además de incumplir con el horario, sustraen materiales y equipos.
Manifestó que el propio SNS no ha podido controlar esta situación con una buena supervisión, no solo en los hospitales tradicionales, sino también en los autogestionados.