WASHINGTON, DC – El congresista Adriano Espaillat (NY-13), en colaboración con los congresistas Jesús “Chuy” García (IL-04) y Frederica Wilson (FL-24), encabezó a 77 de sus colegas en la redacción de una carta que insta al Departamento de Educación y al Departamento de Justicia a que protejan a los Estudiantes de Inglés. Las agencias revocaron recientemente la guía federal de 2015 que aclaraba las obligaciones de los estados hacia los estudiantes de inglés como segundo idioma. Esta revocación amenaza con debilitar la aplicación de las leyes existentes, eliminar protecciones para casi 5 millones de estudiantes en todo el país y limitar la capacidad de los padres con dominio limitado del inglés para tomar decisiones informadas sobre la educación de sus hijos.
La carta insta a los Departamentos de Educación y de Justicia a:
- Restablecer la guía de 2015;
- Financiar plenamente y dotar de personal a la Oficina de Adquisición del Idioma Inglés (OELA) y a la Oficina de Derechos Civiles (OCR);
- Restaurar los mecanismos de supervisión y cumplimiento; y
- Aclarar cómo harán cumplir las leyes existentes y precedentes en la práctica.
“Todos los estudiantes de nuestra nación merecen la oportunidad de aprender, crecer y alcanzar el éxito”, dijo el congresista Espaillat. “Sin embargo, las últimas medidas del Departamento de Educación se centran en anular el progreso que hemos logrado para apoyar a millones de estudiantes que aprenden inglés (EL). No podemos permitirnos dejar atrás a estos estudiantes y sus familias. Debemos hacer todo lo posible para revertir el rumbo e implementar las protecciones que les ayudarán a prosperar”.
“Esta Administración está haciendo todo lo posible para crear una clase marginada al negar incluso el derecho más básico, como la educación, a las personas de origen inmigrante. Casi 5 millones de estudiantes de inglés como segundo idioma en todo el país dependen de las escuelas para cumplir con sus obligaciones legales en materia de educación, y la mayoría son ciudadanos estadounidenses. Yo fui uno de esos niños, y sin los recursos adicionales que me ayudaron a hablar con fluidez, no habría prosperado”, dijo el congresista García. “Seamos claros: la ley sigue siendo la ley; retirar las normas envía la peligrosa señal de que su cumplimiento es opcional. Esta revocación socava la transparencia, debilita la aplicación de la ley y dificulta que los padres con un dominio limitado del inglés tomen decisiones informadas sobre la educación de sus hijos”.
“Represento a una comunidad con una gran población inmigrante. En el sur de Florida, y en todo el país, muchos de nuestros niños en las escuelas son estudiantes de inglés que simplemente intentan forjar su futuro. Estados Unidos está construido por inmigrantes de todos los ámbitos de la vida; sin embargo, este gobierno no se detendrá ante nada para aterrorizar a los inmigrantes por todos los medios posibles, incluso atacando a los niños en las aulas”, dijo la congresista Wilson. “Quitarles los recursos y las normas a los estudiantes de inglés es una decisión cruel e insensata. Nuestro sistema educativo siempre ha tenido la obligación de acoger a todos los niños que entran por nuestras puertas. Quitarles estos recursos para el aprendizaje del inglés socava los derechos de millones de niños, debilita nuestra capacidad de ayudarlos a convertirse en los angloparlantes que el presidente dice querer y traiciona el compromiso de esta nación con los inmigrantes. Esta decisión debe revocarse de inmediato”.
“La anulación de esta guía sobre derechos civiles es el último ataque contra los estudiantes de inglés por parte de la Administración Trump. Eliminar esta guía no debe ser una excusa para negar el derecho de un estudiante a una educación de calidad. Respaldamos la petición del congresista García para su restitución inmediata”, declaró Janet Murguía, presidenta y CEO de UnidosUS.